miércoles, 4 de noviembre de 2009

La genialidad de Kubrick


"La naturaleza humana, básicamente cambiante e inestable como el polvo, no soporta las ataduras; si se ata, no tarda en romper con rabia las cadenas hasta que absolutamente todo queda hecho pedazos, las paredes, las cadenas y su propio yo."(Fragmento subrayado por Stanley Kubrick en la obra de Franz Kafka Parables and Paradoxes, Nueva York, 1961).


Con razón, su amigo Michael Herr escribió en el año 2000, un año después de la muerte de Kubrick, un libro de donde se entienden muchas cosas del brillante y enigmático personaje. Muchas de las personas que creyeron conocerlo, sólo sabían de él por la información procedente de la prensa, y en concreto, de la prensa del espectáculo y la farándula. Casi ninguno de esos reporteros lo conoció, porque el consideraba una locura conceder entrevistas, a menos que se fuera a estrenar una película, y eso! Para él no era nada personal, pero tal vez muchos periodistas se lo tomaron como algo personal. El periodismo actual se centra en estilos cada vez más vacíos, espectáculos brutales, estúpidos y afortunadamente efímeros y pasajeros. Éste es el mundo de el que Stanley Kubrick decidió convertirse en un maestro, y uno de los caminos que utilizó fué vivir apartado. De ahí se entiende que en una época en que tantas celebridades están ansiosas por estar bajo los focos del periodismo farandulero, ése que dá fama por la vía fácil, alguien que no quiere hablar con la prensa del espectáculo pueda parecer excéntrico, solitario, misántropo, loco, autócrata, adusto, frío y arrogante.

Pero mucha gente quedó muy afectada por su muerte, comenzando por su familia, ya que fué un padre y un marido cariñoso. Resulta difícil de creer la cantidad de gente que le quería y lo mucho que le querían.

Nunca hablaba de sus películas mientras las hacía, y cuando las acababa, tampoco hablaba mucho, ni siquiera a los amigos. Más que nada, no quería hablar del "significado", porque creía tan apasionadamente en su significado, que intentar hablar de él sólo podía echarlo a perder. A pesar de ser quizás un archi-materialista y un artista del mundo material, fué autor de la imágen espiritual más inspirada de la historia del cine, el niño de las estrellas que contempla las vacías galaxias intemporales de la existencia después de la existencia, esperando pacientemente a volver a nacer.


¿Definir a Kubrick? Exigente, subversivo, audaz, amado y odiado, magnífico, indescifrable, obsesivo, legendario, controvertido, excéntrico, retraído y solitario, perfeccionista, megalómano, meticuloso, enigmático y hermético.


Y para terminar, recordemos algunas de sus películas: Killer´s Kiss, The Killing, Paths of glory, Spartacus, Lolita, Dr. strangelove, 2001: a space odissey, A clockwork orange, Barry Lyndon, The Shining, Full Metal Jacket, Eyes Wide Shut.


¿¿Quieren más??


El Caminante

2 comentarios:

  1. que pedazo de genio q es stanley no? parece un director de solo obras maestras... su caracter pasa a segundo plano cuando se trata de este nivel de artista... esa frase inicial la voy a usar en mi blog alguna vez... salu2...

    Cuando el arte ataque

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  2. Muy interesante tu aportación.
    Muchos somos los que hemos disfrutado de la genialidad de Stanley.
    Saludos.

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